En todo atleta hay una zona del cuerpo fundamental para cumplir con éxito sus objetivos deportivos. En este caso nos referimos a la zona núcleo, que es conocida mayormente como «el CORE».
Esta área del cuerpo, podemos decir, es el soporte que permite tener una mejor funcionalidad integral. De ella dependen muchos aspectos, todos relacionados con lo que el corredor necesita. Incluso, con el fortalecimiento de esta zona se pueden evitar lesiones.
Si aún no estás familiarizado sobre cuál es la zona CORE, te diremos que es el área que forman la pelvis, espalda baja, glúteos y, como parte fundamental, el área abdominal.
Son diversos e interesantes los beneficios que todo corredor obtiene al entrenar de forma periódica y efectiva la zona CORE de su cuerpo. Entre esos beneficios se destacan:
Cuando procuramos fortalecer nuestra zona CORE, se evidenciará una mejoría sustancial en nuestra técnica de carrera y, por supuesto, beneficiará nuestra postura y significará una protección de la columna vertebral.
Al hablar de la energía nos referimos a la forma de evitar tener niveles exacerbados de cansancio. Aunque pueda parecer contradictorio, es clave el fortalecimiento del CORE para que el cuerpo se desgaste menos en los entrenamientos y competiciones.
En la gran mayoría de los casos las lesiones aparecen por la incorrecta ejecución de movimientos o porque estamos haciendo un uso de nuestros músculos mayor al de sus capacidades.
El fortalecimiento de la zona CORE nos dará la idoneidad para seguir trabajando sin hacer un esfuerzo perjudicial. No solo se trata de correr, sino también de incorporar un entrenamiento específico para esta zona del cuerpo.
demás de obtener beneficios en la salud y rendimiento deportivo, puedes disfrutar el hecho de tener un cuerpo tonificado que, sin duda, hará que puedas ser una persona más saludable a la vista.
Esto es así principalmente solo por tener abdominales bien marcados. Para muchas personas, el tener la zona abdominal tonificada puede ser una motivación para continuar atentos al entrenamiento de la zona CORE.
En esta ocasión te indicaremos tres ejercicios específicos que puedes poner en práctica para fortalecer la zona CORE. Aunque pueden ser diversos los ejercicios que podemos practicar con esta finalidad, estos son muy efectivos.
Uno de los criterios principales para elegir el entrenamiento más adecuado está ligado a la recomendación de que para los corredores de fondo es importante hacer ejercicios en cuya ejecución se realicen movimientos similares a los que el cuerpo hace en el momento de correr.
Al realizar este ejercicio es importante la interacción de las rodillas y codos. Para ello hay que tener los brazos apoyados con las manos sobre el suelo, estos deben estar completamente extendidos. Lo mismo aplica a los pies. La rodilla flexionada debe llevarse hasta la altura del codo alternando la izquierda y la derecha.
Durante la ejecución de cada uno de los ejercicios deben mantenerse contraídos los glúteos y abdominales. Se pueden hacer doce repeticiones en cada una de cinco series.
Basados en el ejercicio anterior, iniciamos en la misma posición, pero extendiendo hacia el frente el brazo derecho y hacia atrás la pierna izquierda al mismo tiempo, y posteriormente repites igual movimiento, esta vez con el brazo izquierdo y la pierna derecha. La firmeza de los músculos es esencial para ver resultados.
Este movimiento consiste en colocarte en posición lateral, apoyado sobre la planta de la mano de uno de tus brazos extendidos, debes elevar tu pierna lateralmente hacia arriba y mantener la posición por un máximo de cinco segundos. Puedes realizar entre quince y veinte repeticiones por cada lado en unas tres series.
Todos estos ejercicios tienen una sencilla ejecución, incluso la gran mayoría de ellos no necesitan la incorporación de herramientas especiales o su realización en lugares específicos.
El agotamiento físico puede ser una variable importante en el momento de entrenar la zona CORE, pero para ver resultados y disfrutarlos hay que mantenerse constantes. Lo más recomendable es dedicar un día al énfasis en el entrenamiento de una de las áreas de la zona CORE, por ejemplo, un día a los abdominales, otro día a los glúteos, otro día a la espalda, y así sucesivamente.
La relación del éxito deportivo de los corredores de fondo con el entrenamiento de la zona CORE es importante y es necesaria la incorporación continua de este tipo de entrenamiento para tener un mejor rendimiento y, por supuesto, una buena salud.
